Que mono Tomás con su carrito….¡Pues no es su carrito! Los niňos se quitan los juguetes los unos a los otros. Se pegan, ceden, lloran. Es el Bronx. El primer día que fui al parque no entendía las reglas pero ahora ya me he acostumbrado. Sólo tienes que recordar qué juguete es el tuyo. La gente le pone nombre pero nosotros aún vamos algo despistados. De hecho hemos perdido ya cinco pelotas y la sexta se nos ha pinchado.
La vida en el parque es dura.